martes, 30 de julio de 2013

COACHING DEPORTIVO Y TENIS.

Mi experiencia


He dedicado muchos años de mi vida al deporte y ahora, gracias al coaching, entiendo las dificultades que encontraba a la hora de competir. Dificultades que no eran afrontadas por nadie, ni entrenadores, compañeros, padres, ni por mi misma, porque ni ellos ni yo, éramos conscientes de qué las causaban…

“No tiene cabeza”… era la información que yo recibía y que más se repetía después de los partidos… ¿y eso como lo traducía yo? “No valgo para el deporte”, “no soy buena”, “¡qué mala soy!, ¡no tengo cabeza ni sirvo para el deporte!.... Sentimientos de culpa, resentimiento y victimismo mal gestionados, cada vez más frecuentes y evidentes…

Cada vez que me acercaba a la pista, lo hacia con más temor, más inseguridad y menos confianza en mi misma… estábamos retroalimentando mis creencias limitantes, minando mi confianza y pudriendo mi juego…



Ahora, a posteriori, todo es más sencillo de entender… no hay culpables para esto, nadie era capaz de darme una solución a mi inseguridad, a mi falta de rendimiento en las competiciones y a mi cada día menor deseo de seguir disfrutando con lo que más me gustaba… Yo sabía que era la presión en los partidos, pero desconocía cómo superarlo.

Ahora con el coaching y con el coaching deportivo, entiendo cuanto podría haber mejorado mis conductas,  mis pensamientos, mi confianza (que traspasaba el área del deporte arremetiendo día a día esa inseguridad en mi vida personal), y por supuesto mi rendimiento en el tenis. Ya no disfrutaba compitiendo, hacía mucho que no lo hacía.

Un día tomo la decisión de dejar el tenis, se acabó, estoy cansada, “cuelgo la raqueta”. Era temporada de verano, intensa en torneos, y estoy inscrita en un torneo al que llamo para cancelar mi participación. El director del torneo me pide por favor que no abandone aún, que juegue el campeonato puesto que voy de cabeza de serie nº 1 y le “desmonto” el cuadro… Me sentí mal y acepté jugar. Aunque esa vez era diferente, iba a jugar, solo eso. A divertirme, a disfrutar. Iba ligera de equipaje, sin presión. El resultado fue apabullante. Gané el torneo. Solo perdí dos juegos durante toda la competición. Estuve a un nivel superior, a mi nivel. Hice todo lo que no era capaz de hacer en un torneo: saque y volea, apenas fallos, golpes imposibles, sin críticas ni enfados, sólo sonrisas y satisfacción. Esta vez el contrincante no me acobardaba. Nada ni nadie del  exterior desviaba mi atención. El rival, las pelotas, y mi raqueta, no había nada más. Fue especial. Era el adiós a lo que tanto me gustaba.


Mi aprendizaje en aquel momento se quedó en la importancia de no sentir presión, de jugar para disfrutar, sin ninguna expectativa. Obviamente me generó seguridad, me demostré a mi misma y a los demás, que soy capaz.

Coaching y tenis


Caer al fondo, a veces es la única manera que tenemos de aprender y mejorar, y en definitiva de cambiar. Yo tuve que abandonar este deporte o tomar esa decisión para darme cuenta de qué me impedía disfrutar de él, de empezar a ser capaz de disfrutar jugando al tenis. Desde ahí mis resultados eran mejores, aunque mi compromiso con el tenis era menor. Como digo, ahora gracias al coaching, le pongo nombres, entiendo qué sentimientos tenía que me bloqueaban, como fui construyendo una red de creencias que me impedían cada día, desarrollar mi juego. La mente llamada por Timothy Gallwey nº1, tenía totalmente oculta y avasallada a mi mente nº 2, la que sabía jugar…



La inteligencia emocional en el deporte, básica y fundamental para entendernos y comprender la información que cada emoción quiere transmitirme. A mi el miedo me llegó a bloquear, mis músculos antes de entrar a jugar, a competir, ya estaban bloqueados, tensos, rígidos… en esa situación era difícil jugar un partido.

Tener un coach hubiera sido mi salvación. Pero no un salvador en plan “héroe”, no. El coach te facilitará herramientas para que tú hagas y decidas. Sentirás que eres tú quien te salva, el te dará la mano y caminará contigo, pero serás tú quien comprendiendo tu actitud, tus pensamientos, tus conductas, tus circunstancias, serás el que decida cómo cambiarlo y responsable del cambio. El coach te ayudará a abrir los ojos y asumir tu responsabilidad.

Con este artículo, quisiera trasmitir la utilidad en el deporte y en cualquier ámbito, de esta herramienta tan potente que es el coaching. No sólo han de utilizarla deportistas de primer nivel… Te ayudará a encajar las piezas del puzzle que somos, y a recobrar el sentido, que yo en mi caso perdí…

¿Por qué no disfrutar más de tu deporte sea cual sea tu nivel? ¿Por qué conformarnos con esos resultados si pueden ser mejores?

Como te comportas y como piensas mientras practicas tu deporte, al final es un reflejo de cómo piensas en tu día a día… El coaching deportivo, aplicado a cualquier deporte: coaching tenis, coaching golf, coaching para futbol, balonmano, tiro con arco… te ayudará a mejorar tu rendimiento y satisfacción en la práctica de tu deporte pero esto, inevitablemente te conducirá a una mayor satisfacción personal, una armonía en tu vida, un equilibrio que se traducirá en confianza, seguridad, autoestima, motivación,… y en definitiva felicidad.









No hay comentarios:

Publicar un comentario